Duelo de infarto el que se vivió en el Olímpico de Hortaleza. El cuadro visitante afrontaba este encuentro con la necesidad de sumar de tres para salvar la categoría. Desde los primeros minutos, los hombres de Javier Pazos salieron a por todas, marcaron y supieron sufrir ante un gran rival como es Fooden.

El choque comenzó con las primeras aproximaciones por parte de los negros, sobre todo a través de Adrián López y Nicolás Prieto, que llevaron mucho peligro al principio. Pronto empezó a equilibrar la balanza el conjunto verde, que a través de Javier Majadas y Álvaro Forcada encontraron la fórmula de hacer daño al rival. 

Los locales comenzaron a hacer cambios y tras la entrada de Álvaro Moreno-Luque, líder absoluto del equipo, metieron una marcha más al partido y empezaron a complicar a la zaga visitante, que estuvo formidable. Mateo Camiña y Javier Pazos estuvieron muy atentos a las marcas y frenaron en muchas ocasiones las ofensivas negras.

El marcador no se movió en toda la primera parte. Las llegadas al área fueron abundantes, pero no terminaban de concretarse en ocasiones manifiestas de gol y no suponían demasiado peligro para Santiago Wakonigg y Jaime Lázaro. 

Tras la reanudación, Miguel Rodríguez-Sahaguí disfrutó de una gran ocasión que a punto estuvo de ser el primero de los visitantes, pero el disparo se fue desviado. Fooden comenzó algo más relajado, normal teniendo en cuenta que El Manojar se jugaba la liga.

Los verdes presionaban muy alto y asfixiaban la salida de pelota negra, que encontraba en Jacobo Olalde la mayor amenaza para el rival. Los visitantes comenzaron a llegar con más peligro y en el 36 lograron el tan ansiado, y, como es lógico, muy celebrado tanto que iba a suponer la salvación del equipo.

Manuel Muñoz remató con el alma un balón que recibió en área rival, y tras un gran control, le pegó con el alma y consiguió batir a Wakonigg. 0 a 1. El Manojar, consciente de la importancia de la ventaja en el marcador decidió defender el resultado. Y aunque quizás fuese arriesgado, finalmente les salió bien. 

La zaga verde estuvo espléndida, al igual que Lázaro, que detuvo un gran disparo de Mauricio Arrechea, salvando a los suyos. Se hizo larga la segunda parte para los visitantes, pero finalmente tras la conclusión de los 50 minutos lograron llevarse los tres puntos y evitar un descenso, que sin embargo, sí consuman Aston Birra e IESE MiM. 


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