Garrido y Carrillo pugnan por el balón
Echó a rodar el cuero sobre el verde del Olímpico para dar comienzo a un choque marcado por la igualdad. Ambos equipos habían cosechado buenos resultados gracias a su buen hacer en el campo. Esta vez se iban a enfrentar a uno de su tamaño.
Diego Morales fue el encargado de dar el primer paso. En el doce, aprovechó un despiste de la defensa local para rematar a placer, nada pudo hacer José Luis Pérez Ayala, 0 a 1. La respuesta de los verdiblancos fue bastante tempranera. Fernando Carrillo propinó un latigazo en el quince para devolver las tablas al marcador, 1 a 1.
Tras una jugada trastabillada, Morales volvió a encontrar premio, 1 a 2. Los chicos de Torino estaban apretando mucho cuando el colegiado indicó el final del primer tiempo. Tras el tiempo muerto, ambos equipos salieron al verde con el chuchillo entre los dientes.
Rafael Núñez volvió a empatar el partido en el veintisiete, 2 a 2. La tensión era palpable, perder no era una opción. Minutos más tarde Carlos López adelantó a los negros con un golazo anonadante, 2 a 3.
Cuando parecía que ya estaba todo el pescado vendido, Ignacio Rotaeche apareció de la nada para poner el 3 a 3. El marcador no se movió más. Tras el resultado, los verdiblancos se quedan el la tercera plaza con trece puntos. Por su parte, los chicos de Torino descienden a la sexta plaza con once.