Tan sólo necesitaban un punto para levantar la copa de la Bundesliga y eso fue lo que consiguieron. A pesar de salir con muchas ganas e intensidad, las ocasiones no pudieron transformarse en goles, pero gracias al empate de Pizzas Oswaldo la noche anterior, y a su golaveraje a favor, el empate fue suficiente.
El encuentro comenzó con intensidad, y Galácticos HTZ estuvo cerca de abrir el marcador con un disparo de Jaime Riesgo que impactó en el larguero. Por su parte, Real Ciudad de México CF también buscó la ventaja, estrellando un potente remate contra el palo. La fortuna parecía esquiva en estos primeros minutos.
Galácticos HTZ continuó presionando, creando oportunidades de peligro y forzando al portero de Real Ciudad de México CF a realizar intervenciones clave. Sin embargo, la madera y la sólida actuación del guardameta mantuvieron la igualdad en el marcador.
El descanso llegó con el marcador sin movimientos, reflejando la paridad en el terreno de juego. Ambos equipos se retiraron al vestuario con la certeza de que la segunda mitad sería determinante.
La segunda parte se caracterizó por un aumento en la intensidad y el físico. Ambos equipos se entregaron en busca del gol que les daría la victoria. Galácticos HTZ, consciente de que un empate les bastaría para alzarse con el campeonato, presionó con determinación.
A pesar de las buenas ocasiones generadas por Galácticos HTZ, Miguel Muzquiz, arquero de Real Ciudad de México CF se erigió como un muro impenetrable, realizando intervenciones cruciales y frustrando los intentos del equipo visitante.
El tiempo avanzó, las faltas aumentaron, y el esfuerzo físico se hizo evidente en el campo. El árbitro pitó el final del partido, y el empate a cero se mantuvo en el marcador. Aunque el resultado no otorgó la victoria a Real Ciudad de México CF, Galácticos HTZ celebró el empate, ya que les aseguró el tan ansiado campeonato. Fue una noche de emociones intensas y un desenlace emocionante para ambos equipos.